El meu amic el foc

El fuego que , combustiona, quema, tuesta, asa, carboniza, cuece o escuece... arde, prende. El fuego que nos ha permitido combatir el frío convirtiendo en cenizas kilos y kilos de leña de naranjo mezclada con pino. El fuego, sí, cuando me abduce, cuando me hipnotiza, el fuego es mi amigo... o como diría Elphomega, el Fuego camina conmigo. A lo que se me ocurre añadir, el fuego camina en y conmigo.

Y ahora, el regreso, tras disfrutar de unas 25horas de amistad, en la montaña, llegando muy cerca de las estrellas cuando el termómetro cruzaba los 0º

Amistad... en un espacio que entre ella y yo hemos creado, nuestra "shared folder", nuestro margen de maniobra dentro de unos límites tácitos, colegueo y buenrollismo sin alcanzar el grado de fuck-friends...

Amistad en modalidad hormiguita, poquito a poco, ahí, cerca, a pesar de la distancia o el tiempo... a lo largo del tiempo hemos pasado por distintas fases... conocidos de vista en el cole, compañeros de curso, amiguetes... (ausencia) reencuentro en la universidad (ausencia) reencuentro en otra realidad, un chispazo, una llamarada, un floash fugaz como el de un spray de laca cuando se acciona frente a un mechero que también se acciona en ese instante...

Efectivamente, esa conjunción en el espacio y en la cronología fue, como digo, fugaz, y fruto de accionar dos resortes a la vez... No entraré en el intento de descifrar las claves que nos condujeron a aquel encuentro accionador, porque ni me corresponde hacerlo, ni me apetece, ni me interesa...

Y ahora, tiempo después, cuando la giratoria noria aleatoria nos ha ido colocando a cada cual en nuestro sitio, ha llegado un momento en que nos hemos reunido en un espacio diferente al habitual, hemos dormido pseudoabrazados, hemos hablado, como de costumbre, de lo divino y lo humano, y nos hemos dado cuenta de que nuestro momento, si alguna vez lo hubo, ha pasado.

Hemos cruzado un umbral, que me atrevería a definir de noviazgo parcial, mejorado... y lo cierto, es que es inusual llegar a fases como esta... en las que la tensión sexual queda tamizada por la confianza. Me siento afortunado.

Follar, acostarse y levantarse... es algo plausible con otras féminas...

Hablar, acostarse y despertarse sonriendo cerca de alguien a quien quieres, pero con quien no has necesitado follar para sentirte bien, es algo solo reservado para una pléyade selecta, en la que te incluyo.

"Quanta faena hi ha ahí!" (pero que siga un altre el que es fique al tall, perque jo... preferisc, sempre que puga, poder xarrar amb tu, i no ser un pardal estacional)

Un abraÇ, a la voreta del foC, perLa!

PD: El meu amic el foc sempre m´ajuda a fer front a la gelor, la meua amiga, té un foc interior, digue´m-ne furor, bé, podré deir que ella es la meua amiga Foc.

PD2: Y, tal y como no ha cesado de repetir la canción de este finde: You! Never be alone!

PD3: Como podrás comprobar, me retracto de lo retractable, lo cual no es óbice, para que siga pensando lo que ya no está escrito en esta entrada... y ya no está escrito, precisamente, porque la confianza nos permite tratar incluso delicadas cuestiones como esta que nos ocupa... Sé que no te habrá resultado fácil hacer una llamada con sutil hálito de censura, pero no te preocupes. Ya no está. Ya pasó. Y no es censura, sino, una anotación al margen. Al menos, me lo tomo así. Debo releer antes de publicar... Ay, mare!